El Irlandés: Una Historia Clásica del Glamour de la Mafia por Martin Scorses.

El Irlandés es la última y apasionante historia de crimen y política de Martin Scorsese. Basada en el libro de Charles Brandt Oí que pintabas casas y adaptada por Steven Zaillian, esta película es una obra maestra en la que los mejores actores de todos los tiempos como Al Pacino, Robert De Niro y Joe Persci se han reunido para ofrecer una épica historia de glamour de la mafia en decadencia.

El Irlandés es más terrenal y demasiado sutil, pero está lejos de ser sosa, gris y aburrida. Esta película tiene algunas escenas muy serias, pero aun así, es sorprendentemente humorística y proporciona una explosión de nostalgia de vez en cuando. La película dura tres horas y treinta minutos, pero gracias a la asombrosa fotografía, no se hace tan larga y no hay ni un solo momento que se haga interminable. Con respecto a las películas modernas a las que estamos acostumbrados, la fotografía de esta película es bastante diferente y no tiene una sobreabundancia de planos gran angular o simétricos.

El Irlandés rara vez parece incoherente o temáticamente fragmentada a pesar de su artificio de flash-back/flash-forward. Los actores están rejuvenecidos y envejecidos digitalmente. La tecnología de envejecimiento utilizada en El Irlandés es impresionantemente discreta, y después de un tiempo, uno se confunde bastante sobre la edad de los actores principales.

De Niro, en el papel de Frank Sheeran, nos conduce no sólo a través de los flashbacks de los años salvajes de un asesino a sueldo, sino también de su ascenso, declive y caída.

Frank es un veterano de la Segunda Guerra Mundial y asesino a sueldo de un sindicato del crimen que a sus 80 años hace un viaje por el carril de sus recuerdos con una mezcla de orgullo y lamento mientras está sentado solo en una silla de ruedas en una residencia de ancianos. Con la barbilla levantada, la boca hacia abajo, el pelo blanco y los ojos nublados mirando al frente, empieza a hablar, y su declaración se convierte en la narración de la película.

Todo esto se enmarca en un largo pero monótono viaje por carretera en 1975 para asistir a una boda de Pensilvania a Michigan, con Sheeran al volante, su jefe Russell en el asiento del copiloto y sus esposas sentadas atrás. Frank reflexiona sobre un pasado en el que la sangre salpicaba sin piedad paredes y rostros. Aquí el viaje por carretera plasma literalmente la idea de la vida como un viaje.

Con titulares en pantalla que cortan la respiración, se presenta a muchos personajes, detallando sus nombres y la hora de su muerte. Sólo unos pocos murieron de muerte natural, mientras que la mayoría lo hicieron de forma trágica y violenta.

En los años 50, Frank trabajaba como conductor de camiones de reparto en Filadelfia cuando empezó a vender parte de su cargamento a Skinny Razor, que era un gánster local. También era miembro de la familia del crimen de Filadelfia, encabezada por Angelo Bruno. Frank fue acusado por su empresa de robar, pero el abogado sindicalista Bill Bufalino consigue salvarlo después de que se niegue a dar el nombre de sus clientes. Bill presenta a Frank a Russell Bufalino, jefe de la familia del crimen del noreste de Pensilvania. Frank empieza a trabajar no sólo para Russell, sino también para otros miembros del hampa del sur de Filadelfia.

Russell presenta a Frank a Jimmy Hoffa, jefe de la Hermandad Internacional de Camioneros. Jimmy habla con Frank por teléfono y le pregunta: "¿He oído que pintas casas? Aquí, pintar casas es un eufemismo para referirse al asesinato y al asesinato por encargo. Pintar casas también hace referencia a la sangre que salpica las paredes después de disparar el revólver, lo que muestra la naturaleza fría y brutal de estos sicarios y mafias que no tenían emoción ni arrepentimiento por lo que hacían.

Jimmy se enfrenta a la creciente presión del gobierno federal y al ascenso del Teamster Tony Pro. Frank acepta trabajar con Hoffa y convertirse en su guardaespaldas, espía y ayudante. Frank y Hoffa tenían un vínculo de amistad tan profundo que compartían la habitación de un hotel y, mientras el jefe sindical más poderoso estaba en pijama, lavándose los dientes, ambos parecían más una pareja felizmente casada y menos unos buscapleitos. Hoffa se hace muy amigo de la familia de Frank, especialmente de su hija Peggy. El silencio de Peggy afecta profundamente a Frank, que parece distanciarse de él.

El periplo de Frank como asesino a sueldo también está contextualizado por los acontecimientos políticos de la época, como el fiasco de Bahía de Cochinos, la elección de John F. Kennedy, la crisis de los misiles cubanos, la caza de Hoffa por Robert Kennedy, el asesinato de John F. Kennedy y el Watergate. Hoffa fue detenido y declarado culpable de manipulación del jurado en 1964. Entretanto, Frank también transportaba armas a la CIA y desempeñó su papel en el cataclismo bautizado como "Dallas" en 1963.

Frank "Fitz" Fitzsimmons trabajó como sustituto de Hoffa durante su encarcelamiento, pero pronto empieza a conceder préstamos sin intereses a las mafias y a gastar en exceso el fondo de pensiones del sindicato. Mientras, la relación de Hoffa también se deteriora irremediablemente con Tony Pro, encarcelado por extorsión.

En 1971, el presidente Richard Nixon redujo la condena de Hoffa y le prohibió participar en cualquier actividad de los Teamsters hasta 1980.

A pesar de sus condiciones de libertad condicional, Jimmy Hoffa planea recuperar su estatus y poder, y su creciente falta de respeto hacia otros líderes de los Teamsters y sus intereses en familias criminales afines se convierten en un punto delicado para Russell. En 1973, durante una cena en honor de Frank, éste le pide a Russell que advierta a Hoffa de que los jefes de las familias del crimen están descontentos con su comportamiento. Hoffa, sin embargo, hace caso omiso de esta advertencia y afirma que es intocable y que sabe cosas que podrían hacer que quienes le amenazan acaben en la cárcel.

Mientras se dirige a la boda de la hija de Bill en 1975, Russell informa a Frank de que ha sido seleccionado para ejecutar a Hoffa porque los mafiosos se han hartado de Hoffa y ahora quieren deshacerse de él. Siendo Frank el verdugo de Hoffa, no podrá advertirle ni salvarle después de que ambos conduzcan hasta un aeropuerto, Frank embarca en un avión con destino a Detroit. Hoffa, que tenía una reunión programada con Tony Pro y Anthony en una cafetería local, se sorprende al ver a Frank llegar tarde con la gánster Sally Bugs y su hijo adoptivo Chuckie O' Brien. Hoffa es informado de que la reunión se traslada a una casa. Al entrar en la casa, Hoffa se da cuenta de que se trataba de una trampa. Se da la vuelta, pero es demasiado tarde, ya que Frank le dispara dos veces a quemarropa. El cuerpo de Hoffa es incinerado para eliminar todo rastro de él.

Russell, Frank y Tony Pro son condenados por todos los cargos, pero ninguno incluye el asesinato de Jimmy Hoffa. Uno a uno, todos empiezan a morir en prisión. Frank sale finalmente de la cárcel y es ingresado en una residencia de ancianos. Frank intenta reunirse con sus hijas, pero Peggy corta todos sus lazos con él tras la desaparición de Hoffa, ya que estaba al corriente de sus brutales crímenes y sabe que es culpable como el demonio.

Los últimos momentos finales de esta película, Frank revisó las viejas fotos de su familia y se encontró con una foto de Hoffa y Peggy es tan poderosa ya que le recuerda cómo él los amaba más, y los perdió. Perdió a su mejor amigo cuando lo mató y a su hija cuando se dio cuenta de que era él quien lo había hecho.

Un sacerdote católico le da a Frank la absolución de los crímenes que cometió durante su vida, y cuando el sacerdote sale de su habitación, Frank le pide que deje la puerta ligeramente abierta. La puerta entreabierta muestra cómo Frank emula la costumbre de Hoffa, que solía dejar la puerta de su habitación ligeramente abierta porque confiaba en Frank. La puerta representa la confianza rota por Frank.

Esta película trata de la pérdida, el pecado, el arrepentimiento, la edad, y de cómo uno puede ser arrastrado por la historia como un objeto pasivo, aunque haya desempeñado un papel importante en darle forma. La película es la última y la mejor de su género. El Irlandés es una despedida de estas leyendas vivas a todos los amantes del thriller policíaco biográfico y es una fantástica obra maestra.