Salvar al Soldado Ryan - Una de las Mejores Películas de Guerra.

Es difícil pensar en una secuencia de apertura de una película que sea más angustiosa que el desembarco del Día D del 6 de junio de 1944, tal y como se retrata en Salvar al Soldado Ryan. Desde el momento en que aparecen los créditos, Salvar al Soldado Ryan no se anda con rodeos, sumerge al espectador en los horrores de la guerra desde el principio y no abandona durante 23 minutos.

Siguiendo el desembarco desde los ojos de los soldados de Estados Unidos a su llegada a la playa de Omaha, Spielberg no hizo ningún guion gráfico de la escena, sino que optó por filmar como si su equipo fueran camarógrafos de guerra operando en medio de la acción de la Segunda Guerra Mundial. Al igual que los soldados, que se dirigían hacia el terror y muchos de ellos hacia una muerte segura, la filmación tampoco se detuvo.

La escena se rodó continuamente, captando a la perfección el caos de la guerra, porque el método de filmación era caótico. Los soldados mueren antes de llegar a la orilla, algunos se ahogan, otros son despedazados por la metralla y se muestra a un soldado buscando su brazo amputado. En este punto, el público no conoce en absoluto a ninguno de los personajes, pero eso no impide que sintamos el dolor de cada uno de ellos.

Esta secuencia inicial no ha perdido nada de su fuerza, más de dos décadas después del estreno de Salvar al Soldado Ryan, y el resto de la película está a la altura de las escenas iniciales. Basada en gran medida en las experiencias reales de guerra del sargento Frederick Niland, que fue llamado de nuevo a Estados Unidos tras el desembarco de Normandía porque se creía que sus tres hermanos habían muerto. La misión de Hanks, en el papel del capitán Miller, es encontrar al soldado Ryan, interpretado por Matt Damon, en medio del frenesí de la batalla, darle la trágica noticia y enviarlo a casa.

Salvar al Soldado Ryan (1998) - Tráiler Oficial

Panorámica, arrolladora y enormemente ambiciosa, Salvar al Soldado Ryan es también intensamente personal. La escala de la batalla se muestra en todo momento, pero también lo hacen las duras pruebas de cada soldado. El elenco se une como una banda de hermanos, discutiendo sobre la vida de un niño francés, sobre si perdonar o no a un prisionero de guerra Alemán y sobre la eficacia del liderazgo de Miller a medida que la situación se vuelve cada vez más desesperada.

Cuando por fin encuentran a Ryan, lo hacen de la forma más inesperada, lo que conduce a un final tan desgarrador como las primeras escenas. Por encima de todo, Salvar al Soldado Ryan plantea grandes preguntas sobre el valor de la vida y sobre si una vida es más valiosa que otra.

Hanks y Spielberg han trabajado juntos muchas veces. Y está claro por qué. Se trata de dos hombres en lo más alto de su carrera, que hacen magia en el cine cada vez que se juntan. Ambos han trabajado juntos en Atrápame si puedes, La terminal, El puente de los espías y The Post. Pero Salvar al soldado Ryan es sin duda una de sus mejores películas.

Hay quien diría que en algunos momentos Salvar al Soldado Ryan resulta un poco sensiblera, sobre todo al principio y al final, antes y después de las grandes escenas de batalla. Sin embargo, a pesar de la clásica sensiblería de Spielberg, o quizá gracias a ella, la película es sin duda una de las mejores películas bélicas de todos los tiempos, y garantiza que las generaciones que, con suerte, nunca verán un combate en vivo, nunca olvidarán los horrores de la guerra. En la película, Miller se pregunta cómo podrá hablarle a su mujer de un día de guerra. Esos 23 minutos iniciales han hecho más de lo que podrían hacer la mayoría de los libros de historia para mostrar a los que no estuvieron allí cómo es realmente la guerra.